Mi primera carrera de Marathon

30-04-2006. MAPOMA (Maratón Popular de Madrid). Ya cumplo 5 meses corriendo y voy a por ello. Impresionante ambiente, tantos miles de corredores y 42’195 km por delante, parecía una fiesta bakalaera escuchando los gritos de ánimo “Venga, venga” o no recuerdo bien la palabra exacta, eso me hacía poner más nervioso en mi primera maratón. Rafael Montaño lesionado me acompañó los primeros 15km, poco después pensé que estas nuevas rodilleras me frenaban y con ellas no iba a llegar a la meta, así que paré y las dejé caer hasta los tobillos, fue peor el remedio que la enfermedad, me vino un dolor insoportable, pero no era el de la lesión sino muscular al estar acostumbrado a correr esos 15km con las rodilleras, seguí corriendo así un mínimo de 5km más, pero en algún momento el dolor se pasó y empecé a adelantar y adelantar gente :) esto era un chollo :) fue una maravilla hasta el km treinta y poco que se me acabó la gasolina, a partir de ahí ya corría por inercia, sobre el km 38 creo que estaba a punto de desfallecer, iba sonámbulo, no era consciente de que estaba corriendo cuando sentí un grito de ánimo en mi oreja y me despertó :) me di cuenta de que lo iba a conseguir :) aunque las piernas iban bloqueadas ese tramo cuesta abajo me ayudó a acercarme todavía más a la meta y pensar que lo iba a conseguir, incluso iba adelantando a gente. Mis familiares ni me vieron entrar, pensaban que iba a tardar más de 4h, tenían en el recuerdo al gordito de cuando empecé a correr :) Al final 3h39’54” a 5’12”/km. El paso por la Media creo que fue en 1h45'08".
La sensación de haberlo conseguido en tu primera maratón es única e irrepetible, el objetivo es llegar, conseguir correr esa mítica distancia, los siguientes maratones son puro vicio.
No recuerdo bien el circuito, pero creo que empezamos Castellana arriba, tiramos en Plaza Castilla o posterior a la izquierda para bajar seguramente por Bravo Murillo, porque recuerdo pillar Príncipe de Vergara casi desde el Retiro para recorrerla casi completa, al final de esta calle fue cuando me quité las rodilleras, después recuerdo la soledad del Recinto Ferial del IFEMA, y al final subir desde Ventas, terminando la subida fue el grito de ánimo, y aunque se me hizo muy largo ya sólo era entrar como últimamente por el Paseo de Coches del Retiro, eso sí, yo esprintaba hasta cada arco pensando que era la meta y ésta no llegaba nunca :)